Cambiar a Caninsulin
Cuando se necesita un cambio de insulina, uno debe ser muy cauteloso. Es difícil dar líneas generales debido a la naturaleza de la enfermedad, aunque se pueden hacer algunas recomendaciones:
- Si el perro está bien regulado ya – sugerimos empezar con un tratamiento del 50-70% de Caninsulin respecto de la insulina anterior.
- Si no se ha conseguido una buena regulación – sugerimos empezar con el tratamiento de Caninsulin al 75-100% de la dosis usada de la anterior insulina.
En ambos casos, la dosis debe entonces ser ajustada hasta que la regulación sea adecuada otra vez.
- Perros – el incremento de la dosis de insulina variará con el tamaño del perro. Por ejemplo, un perro pequeño que recibe 2 UI tendrá su incremento de dosis con aumentos de 1 UI por inyección. Para perros más grandes que reciben una dosis inicial de 25 UI, incrementos de 3-5 UI por inyección.
Para más información mira en ajuste de dosis en perros. - Gatos – se recomiendan incrementos de 1 UI por inyección.
Para mas información mira en ajuste de dosis en gatos.
Importante:
En todos los casos, uno debería permitir al animal adaptarse a la nueva dosis al menos 3-4 días antes de volver a incrementarla. Aumentos de dosis más grandes o más frecuentes no están recomendadas ya que existe una variación individual a la insulina.
Monitorización después de la conversión
En todos los casos donde la dosis de insulina (tipo, dosis o frecuencia de administración) haya sido cambiada, se necesita una monitorización más exahustiva. Debemos evaluar mediante una curva de glucosa 4-5 días después de cambiar a Caninsulin para verificar si es la dosis correcta o no.
La regulación no siempre es fácil. El factor humano puede ser una gran fuente de problemas. Un producto nuevo a concentraciones diferentes, nuevas jeringas, y/o nuevas pautas de tratamiento pueden confundir, especialmente para el dueño de la mascota. Se recomienda un seguimiento en cada visita. Para más información mira en Monitorización.